Conceptos básicos

La resina PET (o tereftalato de polietileno) es uno de los termoplásticos más utilizados.

Desempeña un papel importante en la vida cotidiana y se utiliza para fabricar una amplia gama de envases.

También es el plástico que más se recicla en todo el mundo y es fácilmente reconocible por el símbolo que aparece en la mayoría de los tipos de envases. 

La resina PET se produce mediante una reacción de policondensación con los monómeros de materia prima ácido tereftálico purificado (PTA) y monoetilenglicol (MEG).

El polímero de poliéster intermedio puede hilarse directamente en fibras o extruirse y cortarse en virutas de poliéster, que pueden comercializarse y procesarse en todo el mundo.

Para producir resina PET de grado botella se requiere una mayor viscosidad intrínseca (IV) y se utiliza un proceso secundario denominado polimerización en estado sólido o SSP.

La polimerización en estado sólido y la posterior cristalización aumentan la resistencia y la claridad de la resina final, y reducen los contaminantes que, de otro modo, estropearían el sabor de las bebidas, como el agua embotellada. 

La resina final puede ser procesada directamente por los embotelladores de bebidas o moldeada por terceros en preformas tubulares, que son sopladas en botellas en un lugar diferente. 

Inastillable: Gracias a su alta resistencia a la tracción y al impacto, el PET es flexible pero resistente, por lo que es inastillable en caso de caída.

Fácil de procesar: la resina PET se puede moldear fácilmente en diferentes diseños, lo que la hace ideal para distintos fines de marketing y marca.

Ligero: El PET es extremadamente ligero, lo que reduce los costes de transporte y las emisiones de carbono.

Transparente: El PET es muy transparente, lo que facilita la exposición y comercialización de determinados alimentos y bebidas.

Altamente reciclable: El PET es el plástico más reciclado a nivel mundial y se puede reciclar fácilmente en aplicaciones similares a las de la resina virgen.

Menor huella de carbono: Cuando se reciclan correctamente, las botellas de PET pueden tener una huella de carbono más baja que otros tipos de envases.

Aplicaciones finales

Además de las propiedades clave descritas anteriormente, la resina PET también está aprobada como segura para el contacto con alimentos por la FDA y otros organismos sanitarios de todo el mundo, lo que la convierte en uno de los materiales de envasado más populares en el sector de la alimentación y las bebidas.

Botellas de bebidas: Bebidas carbonatadas, agua, bebidas para deportistas, zumos, té y café listos para beber.

Botellas de alimentos: aceites comestibles, leche y productos lácteos, salsas, condimentos, pastas para untar y otros productos alimenticios.

Cuidado del hogar: productos de limpieza y lavandería, detergentes, desinfectante de manos y otros productos de higiene.

Cuidado personal: champú, jabones, limpiador facial, gel de baño, lociones, perfumes y cosméticos Envasado farmacéutico: blísteres, viales, frascos y otros recipientes.

Envases termoformados: recipientes para delicatessen, bandejas de productos frescos, microondas y envases de comida para horno

Esta explicación de Czapp se publicó el 7 de junio de 2021.

Para obtener información sobre envases de plástico y resina de PET, póngase en contacto con GLamb@czarnikow.com

Gareth Lamb

Gareth joined CZ in 2021 and is CZ’s PET analyst and recycling specialist. As well as regularly reporting on key market trends and dynamics, Gareth is also developing new research products and analytics within the PET and rPET space. Prior to joining CZ, Gareth led Wood Mackenzie’s PET research service and was Senior Consultant at IHS Markit, working within the petrochemical consulting team. Dr. Lamb graduated from the University of St Andrews with a PhD in organometallic chemistry; and has a masters of Chemistry degree from the University of Liverpool.

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